Todos los "emmm" en tu cabeza. Todos los html, batch, echo. Todos los "tengo que llamar a la Universidad" Todo el tiempo que toma la vida. Todo lo que se requiere y todo lo que queda atrás. Todo. Insaciable.
Primero soy niño, después soy esclavo. Y después soy muy viejo para soñar.
Pero, en el fondo, más allá de lo que pase, tengo un "yo", un "yo" tan apasionado que ahoga el presente, y yo vivo allí. Allí en el fondo de la nada, en el fondo de mi. Sentada en un hongo gigante, en una nube blanca, en un sol radiante o pescando estrellas titilantes.
En un mundo solo mio. Pero muchas veces tuyo tambien. Y quien sabe de quien más.
Voy a ser psicóloga. Ya está casi definido. Tengo el sexto sentido en desarrollo. Presto atención a lo que antes solo la llamaba y me quedo muda, para pensa 3 horas un por qué, reacciones obvias.
El cielo me engaña creyendo que está cerca.
Cerca esta el suelo...
Otra vez el señor gordo habla, y yo escribo. Me tapa este enjambre amarillo que hoy no peiné.
Pareces un perro. Encima, estás con los ojos rojos, mocos y disfónico, hecho un saquito de té. Síndrome de un inicio gripal. Y tu lunar me tiene enfermiza. No podés no ir a un médico, sos un hueco.
Y aunque hueco, hueco te amo.
La peluca nueva te pinta lindo, aunque vos digas que no. Y no me importa. Podrías ser panzón y sin dientes y yo amarte como al camote.
Me gustan los Sugus tradicionales, y el pastel de papas. Me gusta el algodón de azucar y la Fanta. Me gusta cantar. Me gustan los boxer. Y los border collis. Me gusta la morcilla y caminar en la calle a la madrugada. Odio la luz. Amo los vampiros. Si me corto las venas sangro tinta. Y el profe de Historia me cae bien.
Del resto no hablo.
Suena la chicharra y la voz monótona del gordo llega a su fin.
Del resto hasta verguenza me da hablar.
Martes, 9.05
|