Pienso, Luego Me enamoro
Abiam Vega
Enciendo la tenue luz de mi habitación, me siento en mi viejo escritorio e intento escribir esa novela que tanto deseo, me he tomado tanto tiempo en hacer y siquiera la he iniciado. Afuera llueve… alguien toca a la puerta, para ser honesto no quiero responder, pero el golpeteo continua; así que abro, se trata de una joven empapada, al ver su mala fortuna la invito a pasar, me mira fijamente con esos hermosos ojos obscuros, ella me parece tan familiar casi como si nos conociéramos desde antes, pero por mas que intento no logro recordar. La invito a tomar asiento, su mirada proyecta cierta felicidad, no se por que me hace sentir triste, es tan bella... intento no ponerme nervioso, ella se sienta y sonríe, no puedo negar que me parece encantadora, intento romper el silencio preguntándole su nombre, retira unos cabellos de su rostro, y me pregunta "¿Cuál es el tuyo?", le digo mi nombre sin titubear, ella con delicadeza se levanta y se sienta a mi lado, posa su cabeza en mi hombro y me susurra… no me dejes ir; una tristeza inmensurable invade mi cuerpo, la melancolía que proyecta en su voz… con un tono de confusión le pregunto "¿quién eres?" ella suspira y me dice "soy lo único que quisiera ser", el impulso de abrazarla, tomo sus manos, ¿un bolígrafo?... tengo un bolígrafo en la mano, y me doy cuenta que aun sigo sentado en mi escritorio y afuera llueve… alguien toca a la puerta, para ser honesto no iré a responder por que quiero estar aquí con ella.
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