Minutos

Mi reflejo se distorsiona. En el túnel pequeños segundos me absorben a la luz. Miro, pero no veo nada más que gente. Gente, posicionada al desfile. Ordenados, quietos, silencio. El leve viento susurra detrás mío, choca conmigo y me pregunto, pero olvido. Describo las líneas, que dibujadas comienzan a hablarme, a escucharme, a conmover lo sensible; lo no sensible que aún puedo mantener. Es como si estuviera detenido en el tiempo. Dentro de este espacio me parece todo congelado, muevo los ojos rápidamente, trato de desconcertar alguna figura que, junto a mí, coquetee caprichosa.
Miro hacia arriba, los hombres están invertidos. Error, algo sucede aquí, ella con sus manos, y algo dentro de su bolsillo. El rostro pálido en profundo suspiro, invita a sacudir el polvo que logra inventarte un nuevo nombre. Está ciega, temblando, cuando su mano toca la mía, y, que en el fondo, detrás de ella comienzo a comprender el clamor de sus ojos. Ésta vez no lancé mi cuerpo al vacío, ésta vez ...secaron mis lágrimas sus cuerpos.