Estaba aprendiendo a vivir, desesperada, y fue difícil dejarte, sufrí tanto tiempo en silencio, saber que no iba a recuperarte, que después de este paso no había vuelta atrás, y que nunca podrías perdonarme, ni encontrarme de nuevo amor, lo siento, perdóname, pero debo ser fría, y entender que tu no eres para mi, tu te mereces a alguien mejor que yo, mas fuerte, mas fuerte que yo, que crea en tu amor, y que crea en su amor al volver a mirarte, sin perderte amor.
Discúlpame, pero debo partir a este nuevo mundo, a mi mundo, donde pueda volver a ponerme de pie, y ser yo misma, ser libre, sola, me estoy abandonando, me estoy dejando libre a mi suerte, necesito golpearme para aprender, y para amarte realmente, debo crecer, debo madurar, debo caerme, debo sufrir.
Se que al final del camino encontraré a un hombre que me haga sentir el amor que necesito, que me ame incondicionalmente, y que me haga el amor como a una mujer, se que tu me olvidaras, en un tiempo, y que conocerás a otra mujer, mejor que yo, y que será ideal y perfecta para ti, por el momento se que nuestro amor es por compromiso, por que nos sentimos bien al lado del otro, pero no estamos creciendo juntos, estamos atados a esta vida rutinaria y ordinaria que nos impone el mundo, y no quiero eso para mi, quiero conocer, quiero experimentar, quiero sentirme libre. Quiero ser un ángel del pasado para ti, y quiero sentirme especial con alguien que me ame de verdad, y que se preocupe si las cosas andan mal, que sea mi amor infernal, que llegue sin preguntar y me entregue su vida, sin volver atrás, que me ame desde siempre, que nuestro destino este escrito en las estrellas, y que las estrellas nos guíen al reino eterno del amor. Quiero despertar a su lado rodeada de la azul inmensidad, quiero abrir mis alas y entrar con el al altar de nuestro señor, quiero aprender a volar con su amor, con su libertad, y con Dios.
Quiero que me ame con el cielo, con curiosidad, que cada día sea una sorpresa nueva que encontrar, que cada día nos sorprendamos de lo mucho que nos amamos y de lo grande que es nuestro amor, que sea una felicidad eterna, sin despertar. Casi como soñar.