Vi tu cuerpo desnudo en la hora del requiebro cuando la noche no es día y el alba es tan solo un sueño. Formas inconexas cobijándose en la sombra de una ambigua luna que al mar confunde. Vaivén de reflejos en las encrespadas olas con sabor a yodo y sal manando de tus senos. Brazos al viento acariciando el recuerdo de aquellos besos mojados perdidos en el tiempo. Y unas firmes caderas que entran en lo oculto en esta solitaria playa de mi sueño desnudo. Desnudos... Joan © Bosch
Texto agregado el 21-02-2009, y leído por 123 visitantes. (3 votos)