P E R T U R B A C I O N
( 8 o n e t o )
Y es que, a veces, pululan por mi mente
Insanos pensamientos de suicidio,
Y pienso, entristecido, cuando Ovidio
Al destierro marchaba sin su gente.
Alto de catedral, vuelo inocente,
Pero, al llegar al suelo…¡qué fastidio!...
Como no tengo el cráneo hecho de iridio,
Mis sesos desparramo cruentamente…
¡Lejos de mí, la idea perturbadora…,
La vida no es tan mala, algunas veces!..
¡Ya moriré, cuando me llegue la hora!...
Por eso, Dios, levanto a Ti mis preces,
Para que, en mi existencia pecadora
Y en mi “artículo mortis”, no haya jueces…
EMILIO 16 Febrero 2009
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