Quisiera saber, cual pudo haber sido mi nombre o a quien me parecería para poder presentarme formalmente ante ustedes y poder contarles mi historia con un poco mas de propiedad.

Hoy, no soy mas q un recuerdo de lo que pudo ser y no fue, hoy por hoy, soy una de las millones de luces que fueron apagadas antes de siquiera ser encendidas, por la simple idea de que quizás sin mi estarían mejor (¿como pudieron negarme sin ni siquiera conocerme?).

Mi existencia podría remontarse a aquel momento donde esos dos seres que se hacen llamar personas, en un acto de pasión carnal infinito unieron sus almas sin ningún tipo de precaución, sus cuerpos exhalaban aires de amor y sustancias iban y venían, el alcohol la cocaína y la música estridente cundían el ambiente de lo que se suponía seria una noche inolvidable para aquella pareja que se había conocido hace una hora.

Lunas y soles se intercalaron en el cielo venezolano durante tres meses y una semana, fue ay donde María se dio cuenta de lo innegable de su situación, la vida reventaba de ilusiones en sus entrañas, un nuevo medico, o abogado iba a llegar a este mundo con ansias de cambiarlo, o quizás solo de pasar su vida serena en el.

Pero no todo en esta asquerosa existencia es sencillo verdad, no todos son sensatos, no todos son maduros, y no todos queremos morir; lamentablemente el día 27 de febrero de un año bisiesto el individuo quien pudo haberse llamado mi padre sesgo mi vida sin ni siquiera consultarle a María y mucho menos a mi, era de noche y llovía a cantaros cuando a traición y de espalda Manuel perforo el abdomen de María en plena calle trinidad, el metal se deslizaba por las capas de piel de María y llego a lo que pudo ser en un futuro un gran corazón, el mío.

Fue ese día, el 27 de febrero del 2010, a la 1 de la madrugada cuando a las afueras de su casa María callo abatida en el piso, muriendo lentamente mientras su sangre de derramaba en la calle trinidad, sus padres lloraron y Manuel se suicido al día siguiente del velorio.

Santa madre divina que reinas en los cielos, tu que expusiste a tu hijo Jesús, te imploro hagas llegar mi voz, la voz de alguien que nunca existió, la voz de un error, la voz de una noche de locura, quizás la voz de quien pudo ser el próximo presidente o el próximo papa, de cualquier manera te pido de mil amores que dejes brillar la luz de aquellos que no tienen chance, de aquellos que buscan esa luz y no la encuentran.

Esta no fue mas que la declaración frustrada de lo que pudo ser un hombre de bien que solo quería ver el mundo de allá afuera, saborearlo, olerlo, sentirlo, amarlo, en fin ser parte de el, deja que la luz que produzcas brille, por que a ti no te apagaron.