Tengo que admitir que hoy estuve sensible, sí, eso es. Cada cosa que me han dicho me torturaba lo suficiente como para salir gritando que quiero morirme cada 5.6 milecimas de segundo. Una unidad lo suficientemente pequeña como para expresar la cantidad de veces que mi alma se desesperó lo necesario como para exigirme que abandonara mi cuerpo...

No tuve comidas ricas hoy, no, ni Oreos ni Froot Loops ni gomitas ni Citric de naranja, como para decirles que tuve mis ratos de golosa cada dos por tres. No. Ni siquiera tuve mi gloriosa mediatarde con tostadas. Se me había cerrado el estómago, quieren saber por qué? Lean "So Far Away (Today) Staind" que subí hace dos días, ayer con angustias y sin vos, con un vos que estaba lejos, escondido, ofendido, encaprichado, demasiado orgulloso como para ablandarlo y hacerlo entrar en razón...

Recién llevo una hoja con una letra descontrolada, acelerada y ferozmente escrita, donde se nota perfectamente la intranquilidad que pesa en mi corazón en este momento.

Tu mensaje interrumpe mi escrito, pero no me molesta, yo también te amo!

Se que sos orgulloso, pero hay formas de arreglar las cosas, tenemos que hablarles, no queda otra.

(Mi letra ahora se volvió un rayón indescifrable...)

Pienso, que mañana quiero cocinarte algo rico por tan solo una vez, solo una vez que comas conmigo y no te den ganas de salir corriendo a almorzar a otro lado, porque sé que en el fondo te tragás mis platos a la fuerza, pienso, que los cuenteros se dieron cuenta de que me gusta escribir todas las cosas que siento así de crudas como vienen a mi cabeza y que digo muchas veces "quiero", "pienso" y "amo" (quizás porque son tres cosas que me gusta mucho hacer), pienso que hoy no he parado de escribir y que eso me hace bien, pienso que mañana será un gran día y que te voy a ayudar definitivamente a salir de todo esto, pienso que me duele la cabeza de tanto pensar.

Hago un break repentino. Mi hermana dibuja muy bien, debería pulirse.

Esta noche Mc Donald's no hace 24 horas, si yo fuera empleada, cerraría el local para mí y metería la cabeza en la fuente de las papas fritas, abriría mil sobres de ketchup para vaciarlos en mi boca, tomaría helado directamente de la máquina y engulliría tantos Nuggets que mis brackets se soltarían de mis dientes.

Quiero ser dueña de la fábrica de Kelloggs cuando sea grande, y regalaría cajas de Froot Loops a la gente, porque los Froot Loops tienen el mismo poder que el café y el chocolate para hacer feliz, yo lo sé.

Tengo el cerebro dividido en dos: Una parte lleva tu nombre y está toda dedicada a vos; la otra se divide en familia, amigos, religión, poesía, escribir, música, estudio, sexo (un poco), futuro, recuerdos, ropa, VIDA, MUNDO, GENTE, etc, etc, etc...

Los mejores inventos de Dios fueron: el Joel, la palta, mis cereales, la poesía y los libros, mi hermana, las fotos, los abrazos, los besos, los colores violeta amarillo negro y verde, los SMS y MSN, mis viejos cuando se ponen mimosos, mi abuela Betty y Gladis y el abuelo Maco, mi almohada y mi pieza, el tuco, los ravioles domingueros, las empanadas, las estrellas, los patos, la piel, las almendras, el hockey y el rugby, el Fernet con Coca y la Cahipiriña, el helado de frutos del bosque y el de mousse de limón, el Pierito, Rupert Grint, la humita de la abuela Carmen, los ratos perfectos, los recuerdos y la memoria, los deseos y objetivos, el invierno y los colorados, los ojos grises, la palidez, tus rulos y tus manos, tu espalda, tu boca, la Plata 925, la música, el piano, el ron... y un montón de otras cosas más que en este momento se borraron de mi lista. Ah! Y los palmitos con salsa golf.

Amo que me ames y que yo te ame a vos, amo que tengamos sueños en común y amo escribir. Amo amar aunque no me amen. Amo el piano y a mi casa. Amo los recuerdos que nadie borra y la computadora. Amo comer.

Mis últimos pensamientos antes de morir en mi almohada y reencarnar mañana a las 9 de la mañana en el cuerpo de una oruga son: que quiero crecer y estar con vos, tengo que volverme más paciente y menos histérica, quiero ser la Curita a tus heridas, me muero por comer un helado y chocolate con avellanas, tengo que escribir una poesía mañana antes de que vengas, me pregunto si te gustan mis lunares y mis muñecas, cada día mis padres están más desorbitados y mi mundo cada vez más loco.

Me morí un 11 de febrero a las 1.38 am. Después te cuento si soy oruga o no.