1 de Enero de 2008

La revelación deslucida
En una costra enquistada,
Resumen de noticias viejas
Que permanecieron pululando en su desvío,
En la inseguridad que endurecida
Tapó la piel de los dormidos.

En la plenitud de la vereda;
Sobre ella las pisadas dudosas,
Debajo, los muertos seguros -resabio de nopersonas-

Se pueden asumir tantas cosas pisando el concreto
Y tan pocas dentro del agua...
Matamos el flujo,
Crecemos en estancamientos sucesivos
Tenemos miedo, juntamos miedo, meamos miedo
Y refrigeramos las pasiones
Y oxidamos los fluidos
Nos volvemos costra,
Esa que ahoga la esencia
Como tapón adherido/ventosa/sanguijuela
Sacamos conclusiones, tomamos decisiones,
Apoyados en una creencia aérea

Aquí estamos, para ser carne y no resina,
Para ser fuego abrasador,
Para ser menos imagen y más fondo.

Nuestra tendencia al concepto
Si todos fuéramos tan solo wikidefiniciones en un wikimundo
-se me aprietan las entrañas de puro susto de morirme-
Seríamos tan filudos como la roca quebrada o el recife.
Entonces, somos tanto más conceptualización
Y tanto menos roca filuda
Y tanto más célula sensible/excitable
Difícilmente calificamos como definibles
Más bien desprendibles/desmenuzables/desmoralizables/desocratizables

Más que polvo, menos que aire
Una mezcla tan heterogénea que se devanea,
En la inexorable amalgama del cuerporespiro
Y la costra
c
a
e
.
.
.
Cae en silencio, en una muerte pausada,
La del tejido ausente que yace sobre las capas,
Y destapados oímos en otras frecuencias, otras esferas;
Es otra luz, otro mundo.
Es la revancha del sueño,
De la ilusión poderosa, del anhelo
De la inspiración supurante.
La revancha de aquello que nunca muerto, sólo dormitante,
Y despierta, despierto, despertamos con una duda más simple.


¿Es necesario abrir los ojos para despertar o más bien los poros callados?