En una ciudad antigua, vivia una mujer ya entrada en años.
Tenia al costado de su casa un edificio de departamentos, y era muy rica.
-¡No pude juntar señora!, decia uno.
-¡A mediados de mes le traere!, decia el otro.
-¡Espereme señora!
Y, asi voces todos los dias.
La dueña, sola en el mundo, pero muy ofuscada llamo por telefono a su abogado,-¡saquelos de aqui!, ¡inmediatamente!, ¡saquelos a todos ya!.
El abogado, dirigido por las directivas les envio cartas documentos a todos.
Gran susto, corrieron a salir de alli los inquilinos.
La mujer comenzo a reir, a reir a carcajadas, hasta que sintio un gran dolor en el pecho, y cayo desvanecida.
Los inquilinos corrieron todos a socorrerla, llamaron a una ambulancia, y, asi, partieron todos al hospital, menos uno que siempre pagaba la renta.
Pasaron dos dias, y regrezaron los inquilinos con la mujer del hospital.
-¡Esperen, voy hacer algo, dijo la mujer.
Camino hacia la puerta del que siempre le pagaba y le dijo,-necesito que dejes mi departamento!.
-Pero yo pago la renta en termino!
-¡Si es verdad!, pero va a ser el unico departamento que voy a demoler.

Maria1