el hombre que lava los carros es un hombre grotesco, con un rostro lleno de barros muertos, quemados diría yo. usa un sombrero sencillo, sucio y gastado como sus manos siempre atadas a un trapo como si fuera una mutación de su total ser... el hombre que lava los carros tiene familia, madre muerta, hijos alejados y olvidados... el hombre que lava los carros embarra su alma cuando se pone a tomar sin parar pues olvida aquel pasado en que voces amigas le cantaban verdades disfrazadas de mentiras piadosas... el hombre que lava los carros tiene una sonrisa de niño aunque cargue con mas de cincuenta años tras su espalda encorvada y llena de grasa... el hombre que lava los carros brilla todas las tardes cuando lava los autos llenos de polvo y barro, y brilla por un sol lleno de amor que le hace sudar como si expulsara todo un pasado grasoso y pesado... el hombre que lava los carros, lava todos los carros de aquel páramo en donde se estacionan cientos de autos, poblados de perros sin dueño, amigos y compañeros del hombre que lava los carros... y, por cada lavada de carro, lava un poco de sí mismo, pues, sólo lavando día a día, encuentra sentido su agarrotado corazón... es un hombre que lava los carros, día a día... es un hombre que lava su alma, día a día...