Es simplemente el sentirse solo la causa de las depresiones. Es tratar de vivir como cuando, en los años juveniles, todo era digno de admiracion y de encanto. Ahora se trata de no ser tan fogoso y de ver la vida desde un lado mas maduro. Se es joven todavia, pero se necesita un gran esfuerzo para hacer lo que hace veinte años se hacia sin pensarlo. Ese efecto de no tener ya tantas fuerzas se nota desde el comienzo de las tardes frias y lluviosas de Bogota. El clima ayuda para sentirse deprimido y las canciones de luciano pavarotti, se escuchan mas seguido. Es acostumbrarse a la soledad y mirar de pronto una salida a las continuas depresiones producidas por el miedo de quedarnos solos en la vida. Los amigos ya no son tan sinceros y las mujeres se buscan para tratar temas que antes solo se hablaban tacitamente en la cama. Ya no se enamora a cualquiera y de uno nadie se apasiona, pues se destila mas vinagre que vino. Los dientes y las muelas comienzan a caerse y de nuevo se escucha musica lugubre, que pretende demostrar que se estaria mejor muerto que vivo. El frio de la muerte se apodera del artista y se ve la mediocridad de las obras, comparadas con la plenitud de la juventud. No se busca la eterna juventud, pues es una locura no darse cuenta que es una broma pesada de la vida, los primeros treinta años del existir. Ya mas reposado y parco, se deslumbra el desprendimiento de las pasiones carnales, se puede vislumbrar el velo que cubre la ultima morada y ya no lloramos ni reimos con todas las fuerzas, fuerzas que nos abandonaron cuando nos dimos cuenta de la unica verdad de la edad madura: se acerca la muerte y se debe preparar desde una vez el sepelio. Ya no se teme a la muerte y el infierno deja de existir. lo unico que queda es las enfermedades del cuerpo y los adioses primeros del espiritu a la carne morbida. Es que estoy muriendo muy lentamente,...que viva la muerte....