Te descubro en noche de verano tibia,
caminar a pasos lentos cerca de mi,
no me vistes, pero te observo,
en años caidos de dolencias que pasan.
Estas ahi, yo, detras de ti,
viendo el pasado ante mi,
lo compartido con egoismo,
de tu fiel naturaleza.
Contagiosa a la vez,
estas ahi como de lo que se huye,
con temor a la herida,
y, nuevamente tus pasos se aquietan.
Con suspiro arrepentido,
veo sombras nada mas,
ya solo eso quedan,
de una vida juntos.
Hoy yo detras evitando el encuentro,
te descubro, vencido por mi ausencia,
comienza el olvido,
de crueldades perversas.

MARIA1