De vez en cuando te pienso, parece mentira después de tanto tiempo.
Imagino tu vida y la nuestra si el rumbo hubiera coincidido y reviso también los últimos momentos, de vez en cuando.
Pretendo entender, ahora que la edad me persigue con páginas sin cerrar; las razones profundas de los dos caminos tomados y sigo sintiendo ese leve nudo en la garganta que me acompañó por un tiempo.
No puedo dejar de pensar, de vez en cuando, por que cuidé tanto de no equivocarme si finalmente el sabor del fracaso no pude evitarlo.
Sé que estás y sé de vos y te he visto una vez, al pasar y de lejos.
Sé que sabés de mi y que preguntás por mi vida y de alguna manera me tranquiliza pensar que tal vez, no fui el único que perdió algo.
No hay que llorar sobre la leche derramada, pero no creo en aquellos que dicen que no cambiarían nada de lo pasado.
Busco explicaciones, imagino situaciones. Secretamente guardo un recuerdo en un rincón en mi corazón y lo saco a la luz para mirarlo. Sólo para mirarlo; de vez en cuando.