I - NO QUIERO ENTENDERLO MÁS
- Bebé tengo que irme ya son las ocho.
- ¿Tan temprano amorcito?
- Es que tú sabes. Ya lo hemos hablado.
- ¡Es que yo sé! ¡Carajo! ¡Siempre tengo que saber! ¿¡Por alguna maldita vez en la vida podrías dejar de hacérmelo recordar!?


- ¡Jahaira! ¡Jahaira! ¿Me escuchas?
- ¡Sí! ¡Sí! perdóname...te decía que fue más rápido para expectorarme de su vida, no sabes.
- Ya hija deja el asunto y vámonos a la disco.
¡Apúrate y ponte bien perra que todos los chicos solteros van a estar ahi mismo!


- Bebé. ¿Por qué te enojas así? Hablemos de nuevo ven...sentémonos aquí... no te molestes bebecita...
De pronto tuve las ganas incontenibles..
- ¡Malnacido! ¡Miserable! ¡Jamás vas a nada! ¡Jamás mierda! ¡Lárgate basura!
... y le lancé sus llaves directo a la cara.

Y mientras la miraba fijamente, asustado y sorprendido, poco a poco fue saliendo de la habitación. Con las botas entre manos, el saco a medio lucir, la camisa rebalsada, y de pronto, golpeándose con una mesa del Hostal.

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II - ¡PERO SI TE LO ESTOY PIDIENDO!
- ¿Estás seguro?
- Sí amor, es que, no sé qué pasó.
- Pero te dije que tuvieras cuidado.
- Amor tuve cuidado.
- Es que no lo tuviste imbécil. ¿No te das cuenta de lo que haces?
- Amor: ¡Es que estuviste tan buena! ¡Amor! !Amor! ¡Abréme! Vamos perdóname. Nada va a pasar. Y si pasa...yo veo...esta vez... algo haré amor..
- Estúpido te dije que tuvieras cuidado. Házte a un lado miserable, voy al baño.
- Ya, pasa, ve al baño, haz algo.
- Idiota, haz debido haberlo hecho tú desde el principio.
- ¡Amor de nuevo!

Luego de 5 minutos...
- ¿Amor? ¿Estás bien? ¿Me abres? ¡Nada va a pasar amorcito!
- ¡Lárgate imbécil! ¡No te quiero ver! ¡Lárgate!. Lo mismo dijiste cuando me embarazaste la última vez! ¡Y yo echa una estúpida vuelvo a caer!
- Diablos
- Vete yaaaaaa maldito!!

Luego de 5 años.
- ¿Mamá ese Señor quien es?
- Tu papá, Octavio, y de Coquito también.

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