Hoy quise empezar la dieta, pero de pura colera me atravese 15 chocolatitos, de los chiquititos, pero bueno, la culpa la tiene este trabajo, porque me movieron mi silla, me quitaron el cable del telefono, me quitaron mi taza y mi libretita de notas.
Todo el dia paso trabajando, sentada en una silla, frente a una computadora. Pendiente que suene el telefono, esperando algun cliente, oir sus quejas -en ingles- prestar atencion a cada palabra, Dios me guarde, a veces no se les entiende nada a estos gringos. Mas estres, una galletita.
Llega la hora del almuerzo, a sentarme con algun compañero que encuentro en el comedor, mientras comentamos nuestros casos, que me dijeron esto, que me colgaron por mi acento, que no me entendio el pinche hijo de su... necesito un consuelo, vengase pastelito.
Salgo, y la vendedora de la esquina me tienta con una canasta llena de pan dulce recien horneadito, ni modo, pa dentro.
En la noche que llego, no quiero ni tocar las oyas, santo remedio, comida para llevar, hay pizza, pollo, comida china, de lo que quiera... es pecado desperdiciar comida... hasta la ultima migaja se va... me pregunto por que estare tan gorda? |