Estoy tan cagao de calor
que el viento me hace tira
y los tábanos se rajan
El río se enchuecó
y mudo su dócil faz
por páramos de arena
y totoral espeso
Y el guairavo va feliz
rompiéndoles la espalda
al sapo cuatro ojos
al pez de bronce añejo
Por púrpura que fue
este magro atardecer
me ahueono en el Colt de Montt
y en degollar cabritos
me zampé un trago grueso
de su sangre muy caliente
adobado con espinas
ají y ajo cortado
en estrellas urticantes
o fui al hospital
a sanar la borrachera
que siempre me acumula
el bendito año nuevo
o me reí de una gallina
de cogote pelao
pensando que mi abuela
harto se parece
o me puse a mirar
un lagarto amarillo
en un poso séptico
sin techo y arriba los jotes
esperaban mi muerte
como una corona
muy lata y alta
o morí nomás curao
o en mi vena cava
había puro melón con vino
o los charros de Lumaco
no callaban nunca más
o las abejas me picaban
la raja para despertarme
y despedirme de mi abuelo
hasta otro Nilahue más
y ver pelear a mi viejo con los tíos
las mismas hueás de siempre
y en una de esas bailarnos
una cuequita huasa
y despejar la caña
en el rodeo
pasao a culo de caballo
y enamorarme de una chiquilla
un rato e irme pa’l monte
a recoger moras y ponerle
a mirar pa’ Lolol y ponerle
y recordar que en su cementerio
está todo mi genoma
y que yo voy a morir
en la capital
lejos de mi viejo
que me va a decir
de nuevo muchos años
ya huevón despidete de mi Taita
nos vamos pa’ Santiago
terminó el año nuevo