De la nada soplo ágilmente el viento, y elevo su abundante cabellera por el aire denso q brotaba en lo alto de la montana, ella no sabía cómo finalizar su agonía, como acallar aquellas voces q carcomían lo poco q le quedaba de cordura, ni mucho menos, como sacar de su mente los recuerdos, de aquel amor marchito q el mismo viento se llevo....... aun era mediada la madrugada y la luna cómplice le sonrió y a la ves le reprocho, pero aquella madrugada todo escondía, todo cubría y todo lo permitía. Ella con su angelical rostro simplemente sonrió, y escondió de pronto toda su agonía y visualizo un futuro mucho mejor, en el q ya no seria una simple mujer en un simple mundo, en el que ya no dependerá de esperar a aquel príncipe azul, en el no importaría estar sola en el mundo, o q el mundo te haga aparte como en juego de ajedrez. De la nada soplo un viento cálido, que le dio mágicamente un abrazo, y q tiernamente su bello rostro acaricio, seco aquellas negras lagrimas malditas, que infamemente, la amotinaron, y apaciguaron su mirar limitado, que solo divisaba la obscuridad... Ella era solo ella, y tan solitaria como la noche, tan brillante como una estrella en aquel universo q la observaba y q le permitía las mas desagradables aseveraciones y permutaba todos lo resquicios de aquellos adiós. Ella era solo ella, pero enfáticamente era solo parte minúscula de aquel trozo de tierra, que justo al amanecer descubrió y perpetuo y acobijo a los pies de aquella montana a ese inerte cuerpo q fue un día parte de ella, polvo y tierra, carne y hueso, acción y reacción, decisión y determinación.
De la nada soplo el viento, y colisiono su ventana de par en par, ella despertó de sobremanera, todo había sido una horrible pesadilla , q solo reflejaba lo que mas media tenia llegar a ocurrir, ella sabia q era solo pero estaba nutrida y consecuente en ser la protagonista de su propia historia, y no se dejaría ganar tan fácilmente
Por q en su interior sabia la verdad, sabia q nosotros somos la luz eterna, la fuerza mas fuerte sacada de la debilidad, somos aquel viento cálido nos impulsa a seguir adelante, y la energía terrenal q nos mantiene siempre en pie , somos nuestro propio destino, y nuestro propio final, y pase lo q pase ella sabia q no se dejaría ganar, por q todos llevamos dentro ese swich de energía auxiliar, q nos eleva por los aires y nos hace soñar, y creer q en el futuro todo andará mejor, y que no hay color obscuro q no esconda tras, un cálido color de de esperanza y un mejor final….
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