Yo sé imitar pero también robar.
Yo sé que existe el cielo de Dios pero habito esta tierra, donde hay un sol que desde lejos ilumina con inofensivo fuego y una luna girando enamorada.
Todos lo sabemos, los humanos nacemos de un vientre materno. Pero en menor cantidad también pudimos aparecer magicamente. Proviniendo de una larva poderosa, que encierra toda la información de las especies siendo por ello muy especial.
El cielo del más allá además de otras cosas está compuesto por sin-numero de voces (el de este planeta por muchas nubes).
Cada una de estas voces emerge de un ente, quienes yacen a la espera de acoplarse con un cuerpo determinado cumpliendo la función de ser un alma. Puesto que ese sentimiento propio del cielo debe hacerse irremediablemente tangible.
Entonces nos queda que existen dos dimensiones perfectamente ensambladas que se nutren mutuamente. Pero la característica principal de estos entes es que son pura conciencia. Carecen de distracciones, de otra cosa que no sea permanecer aunados consientes de la existencia de Dios.
En cambio esta realidad, de este sistema en el universo, existe pues es evidente que hace falta un lugar donde poder canalizar estas ganas del cielo del más allá, de realizar lo esperado que luego se trocará en distintas materializaciones. Puesto que esta realidad no es una masa compacta como aquella donde todos están asinados, sino que estamos divididos en cantidades de unidades separadas. Por algo ha de existir esta sustancial diferencia. Además de resulta generarse un enorme movimiento en el universo que interviene en la creación de la formas existentes.
Las cosas existen porque existen, no hay porqué negarlas...
Los sentimientos que tenemos forman parte de este necesario tránsito pues expresaran acabadamente la voluntad del conjunto que quedó esperando.
Bueno, bien, todo esto viene a cuento por dos cuestiones, motivos: de querer graficar esta realidad material donde como sabemos casi todos venimos por una determinada fecundación,
y además esta otra posibilidad de la creación espontánea de seres vivos, por un lado.
Y de la otra cuestión, la de la otra dimensión
que es invisible pero que evidentemente existe.
Además la de contar la historia, inclusive a modo de ejemplo, de una mujer que apareció de dichas bacterias superpoderosas que estallan cual Big Bang integrándose perfectamente a esta nuestra realidad.
Y expondré la teoría de que sin intermediar una gestación producto de un embarazo, aun hoy,
en mayor numero de lo que imaginamos,
existen personas que aparecieron de aquella dimensión invisible con dicho procedimiento de creación espontánea. El ejemplo por excelencia es Adán, Eva; y Cintia la protagonista de esta historia.
Pero que intuyo que antes han habido más apariciones espontaneas de seres que entraron de esta manera (también de objetos inanimados) y de ciudades enteras.
Esta persona en cuestión es una mujer muy hermosa de unos treinta años que salió caminando del agua como un zapo.
Y que de inmediato se topara con un hombre que vió lo sucedido, y que por amor a primera vista la adoptara para siempre.
Este señor es un empresario de la moda que pudo rapidamente incertarla en la realidad, para que se valga por sus propios medios echando a volar.
Unas de las características peculiares de Cintia es que puede dialogar con los muertos, haciendo cumplir aquella fantasía de que las almas conservan la imagen del cuerpo que ocuparon.
Su enseguida amigo Clever-up, representante de modelos, fue quien se constituyó en su manager,
además fue su primer amante.
Una relación con mucho placer de por medio,
pero como él es una persona de antemano comprometida afectivamente con otras mujeres, nunca lograron pasar la barrera del anonimato.
Después Cintia tuvo un primer novio en serio,
pobre desgraciado quién fuera víctima de la inseguridad social siendo asesinado frente sus narices.
Digamos que ese amor solamente duró unos cuantos polvos.
Entonces, cebada de calentura, con el rabo entre la cola tuvo que volver a ser amante de su amigo protector Clever-up.
Hasta que más adelante, entabló relación con un tal Quique Lux, de ocupación remisero, del que se enamorara bastante perdidamente y con el cual aun continua noviando.
Pero atención, al que no bien conoció le hiciera los cuernos siendo infiel con otro, el gran affair,
un mecánico de automoviles llamado José.
Que se interpuso con su poder de hombre pintón, fatal. Y que luego igual que a Juance también asesinaron en otro hecho que aun no se aclara.
(Se llegó a sospechar de Clever pero al momento en la investigación se va descartando esta posibilidad).
Por último, existe vinculado a su entorno otro ser de sexo masculino que también la desea intentándola seducir. Al que por prudencia luego hablaremos con más precisión, detenidamente.
Cintia abrió la canilla de la caliente para llenar la bañera. Tiene que asistir a una ceremonia pero teme estar olorienta. Ha desidido pegarse un baño de inmersión de sesenta minutos.
Estando metida en el agua caliente sintió que alguien entró al recinto. Tuvo un pequeño sobresalto provocando olas enormes donde su blonda cintura fue tomada por el líquido cual abrazo fraternal. Es Juance, aquel primer novio muerto quien fuera asesinado a balazos en la puerta de su vivienda. Se refleja cual si fuera transparente.
Está desnudo, ansioso por tocarla, con rapidez se sumerge en el jacussi no ocupando casi lugar,
se confunde con el agua caliente. Se deja ver de colores entre el vapor que emerge de entre las piernas flexionadas de Cintia. Ella lo toma de los cabello sacándolo a la superficie una y otra vez, pero divertida lo vuelve a hundir para usarlo de cepillo que rasca la piel con urticaria.
De todos modos se interesó por conocer como está el finado José, y quien sería el que disparó a mansalva. Pero Juance prefirió dedicar el encuentro solo a tener relaciones sexuales.
-El universo es tan preferible no dando deseos de volver a la iluminada penumbra. Dijo Juance entre borbotones.
Pero Clever acudió de visitas entrando con sus propias llaves, sin pedir permiso entró a la antecamara del toilette mirando por el espejo a Cintia acariciarse. Carraspea su garganta para hacerse escuchar. Ella confiada pregunta quien esta, él ruborizado contestó con un "yo" lacónico.
Cintia recriminó a Clever aduciendo que Quique pronto regresará. No siente vergüenza de que la vea desnuda pero teme que su novio la malinterprete.
Además está Juance jugeteando por allá abajo,
no queriendo interrumpir ese agradable momento.
Pero Clever testarudo avanzó hasta los pies de la bañera e introdujo su brazo hasta el fondo.
-¿Pero por Dios. Que tienes allí? preguntó perturbado.
He tocado algo muy duro.
Cintia careciendo de vergüenza se incorporó sin pudor exibiendo absoluta desnudez, pero insistió en que se retirara que no quería problemas con los celos. Pero Clever volvió a meter la mano,
esta vez sintiendo como unos dientes lo mordían. Pegó un grito de espanto, curioso continuó la búsqueda sin a nadie encontrar. Enseguida hizo el intento de quitarle la toalla, pero Cintia riendo pudo escapar hasta desaparecer por el corredor.
Se refugió en la habitación bajo llave. Clever la persiguió de cerca, ahora impotente solo da golpes a la puerta cerrada, debe conformarse con unicamente espiar por el agujero de la cerradura.
Cintia se vistió de verano, cuando estaba cerrando el placard una fuerza sobrenatural la absorvió metiendola de lleno. Es el mecánico José que no perdió tiempo en besarla.
Clever espera paciente tomando mate en la cocina.
Comienza a sentir deseos de volver a intimar con su subordinada. Pero reprime la fuerza porque no desea mortificarla.
Cintia azomando la cabeza por el placard,
con voz temblorosa y susurrada, a los gritos informa que pronto se hará presente,
pero jamás fue escuchada por ninguna oreja. Aunque volvió a encerrarse en el ropero quitándose nuevamente la ropa.
Cintia repetidas veces besó con dulzura la frente del finado José, quien entre prendas sentó a Cintia en su falda. Diciéndole al oído morbosidades mordisqueando el bulbo de su oreja izquierda.
Pasaron dentro del placard largos minutos de pasión desenfrenada, no obstante Cintia interrumpió la fogosa sesión de este espiritismo tridimensional entre tenazas ardiendo cual antorchas,
para reportarse con vida frente a su jefe y amigo.
Imperativo Clever recriminó el hecho de que aun siga en desaviché, dirigiéndose a la habitación sospechando que algo extraño ocurría.
Pero Cintia prefirió remitirse a solicitar comprensión acuartelándose en el lavadero donde puso el lavarropas a funsionar sin prendas adentro.
Al ver el mueble todo revuelto Clever se acercó metiendo la cara recibiendo una trompada invisible que lo hizo retroceder hasta caer en la cama desmayado, con pajaritos revoloteando la mente.
En ese interín, Quique, educado, tocó el timbre limitándose a esperar como corresponde.
Tiene un ramo de flores escondido detrás de la espalda.
Y muchos ardientes deseos de encontrarse por fin con su enamorada.
Cintia no tardó en recibirlo, poniéndose muy contenta por la visita, pero antes que truene lo previno de que estaba Clever durmiendo la siesta vestido, en su cama.
Quique, no tan en broma, arremetió diciendo que no importa, lo hacemos sobre la alfombra en el living, frente al hogar hechados al abandono.
Se besaron profundo, los fantasmas de Juance y José estaban presentes mirando la escena,
a sabiendas de que Quique tiene fama de ser un amante perfecto, queriendo saber de que se trata ese tal gran arte. Pero Cintia asustada no se puede concentrar, se siente impedida, seca, atemorizada, abstraída al goze que su amado sabe hacerle sentir, entonces desiste de este más que juego, expresando preocupación por la salud de su amigo que yace durmiendo sin motivos.
Cuando fueron a socorrerlo, pareció que era tarde, que estaba todo perdido. Pero ella al instante le hace repiración asistida y masajes cardíacos,
una sesión que duró largo rato pero que ofreció sus buenos resultados, ya que Clever resucitó de muerto.
Tanto Clever-up, que se desempeña de manager de distintas personalidades, como Quique Lux, novio de la ex-modelo hoy periodista, y la propia Cintia, angel que nos aglutina a todos,
nos dedicamos a escribir para la Internet en una página acorde historias de fantasía en conjunto. Ademas de estar yo, Freddy50, el que relata, también comprometido con este grupo de trabajo dedicado a la super producción de numerosos cuentos.
Yo soy el verdadero tercero en discordia puesto que Clever no tiene chance de ser amorosamente correspondido, y el resto están en el cielo del más allá por estar muertos y haber sido buenos.
Con Cintia hemos tenido un aprouch deseando que esto continue, a pesar de como buítres rondar las sospechas aun no lo hemos explicitado a los amigos porque ambos estamos comprometidos con terceras personas a las que también queremos mucho y no pretendemos lastimar, pero no aguantamos la presión fisica de ocultar la expresión libre del amor eterno, más este feo letargo de vivir aprisionados, entonces cueste lo que cueste en cualquier momento lo vamos tener hacer explícito.
Fin.
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