Solo unas gotas de lluvia alcanzaron su chaqueta, en una caída desconsolada, cansada, este pequeño llanto de cielo golpeo lo profundo de su mente… como un vidrio que recibe una piedra a 150 km. por hora y se quiebra en incontables pedazos.
Lo recogieron del suelo, dócil como un osito de felpa; la reacción de un mundo lógico era determinar la secuencia de eventos que desencadenaron tal condición. Especulaciones de corte histórico y longitudinal, eventos enlazados como cadena… Su niñez abruptamente clausurada al descubrir la masturbación, que aun persistía en su vida cotidiana… su adolescencia de marcada rebeldía ante las instituciones tradicionales, excepto la autoridad civil… la muerte inesperada de una amiga cercana hace dos años, y su larga fase de negación… su graduación como técnico electricista, siendo su gran sueño ser cineasta. Precisamente abandonaba el teatro cuando sin razón aparente se dejo caer al suelo ante los ojos bellos y llenos de sorpresa de su muy cercano amigo. Sus padres, su novia, su amigo, sus doctores, nadie lograba comprender lo que sucedió, que pudo haber ocasionado este desenlace trágico; la vida de un prometedor joven confinada a un sanatorio, a una vida vegetal. Revisaron sus cosas, historias escritas de su propia autoría, unos cuantos libretos, revistas y videos (clásicos, ficción, pornografía, filosofía, electrónica, realización cinematográfica). Recrearon su ultimo día de lucidez, solía levantarse tarde y apurado, tomo su desayuno y llamo a su novia, se despidió de su madre entre afanes, en el celular su padre le pedía recoger un sobre en el centro de envíos, luego de entregarlo en su oficina tomo el vehiculo que lo llevaría al jardín donde trabaja su novia, “me saludo como en un día normal” relato ella, disfrutaron el almuerzo y al momento de reiniciar labores el se marcho a ver cine, “una película independiente, nada llamativa en su historia” según la observación de su amigo quien lo acompañaba. Se le escapaba algo, y no sabían que era… no tenían por que saberlo. Nadie pudo haber notado que miro el cielo por casi dos segundos antes que no pudiera ver el mundo mas y cayera al suelo un cuerpo ahora deshabitado, como un desierto infinito. Al alzar la vista encontró unas gotas que brillaban como diamantes reflejando, magnificando la luz del sol y en este flash, en ese asombroso espectáculo pudo ver a su amigo sonriendo y gimiendo mientras lo penetraba confundiéndolo con su novia a la cual veía llena de placer al tocar su clítoris con la punta de la lengua, pudo ver a su padre en la ducha quien frenéticamente aseaba su pene simultaneo a la reacción en el suyo (que nunca había notado) y el regaño de su madre por la forma en que sus manos auxiliaban su primera erección, a aquello que ya no era su amiga, sino sus restos sepultados bajo tierra, el ultimo juego de los niños del parque que alcanzo a filmar y la primera instalación eléctrica que realizo. Vio plena su vida, condensada en una luz tan brillante que se sintió como el fuego que alcanza su máxima llama y luego se apaga. |