Se me abrió un tajo de alma y te tragaste mi sabia, Y yo quede inmune ahí no indiferente Marchita Maldita Con un fuego ese del flexo solar. Ahí hondo me dueles Repetidamente Constantemente No se juega Tan desgraciada En el mundo de jabón oloroso Mocoso desdeñador
Texto agregado el 28-12-2008, y leído por 80 visitantes. (1 voto)