SON PEQUEÑOS NUESTROS OJOS


Nace y muere el pensamiento,
vive en mí solo el momento
en que me mojo en las aguas
del mar de algún sentimiento.
Es sabio quién da las flores
aromadas en su esencia
y no envanece el espíritu
si le elogian sus fragancias,
los jardines se marchitan
cuando miran con jactancia.
El espejo te acaricia
si es cristalina tu imagen,
pobre es el que con vergüenza
contempla su propio traje.
De tiempo se hace la vida,
no dilapides tus pasos
por senderos sin salida,
cambia el rumbo y simplemente,
di como yo: “estoy muriendo”,
no existe razón mas fuerte
ni verdad más evidente
pero desdeña a la muerte,
no le rindas pleitesía,
deja que siga esperando
a la vuelta de una esquina.
Siempre buscamos motivos
para culpar a la suerte,
cuando miramos la copa
vemos la mitad vacía
y si más la perseguimos,
la fortuna es más esquiva.
Siembra sol en tus trigales
y serán muchos los panes,
no envidies copas ajenas,
disfruta de tu sangría,
Él sabe porque te a dado
a beber de su alegría.
A veces por ver lo efímero
extraviamos la verdad,
son pequeños nuestros ojos
ante tanta inmensidad.