Te hallé en la nada,
perdida del mundo,
perdida de ti,
oculta de mi soledad,
vacía de nostalgia,
sola, sin mí, sin ti.
Te hallé en el todo,
caminando al viento,
colgada de un cielo
escupiendo silencios,
con la razón desnuda,
…sin tiempo.
Te hallé en el baúl,
empolvada por siglos,
en medio del ruido
que te escucha impertérrito
contando uno a uno
tus amantes tardíos.
Te hallé en mi rostro,
oculta en mi mente,
donde la vejez no llega,
no domina mis viajes,
ahí dormida, detenida,
con un sueño en la mano,
con tu historia escondida.
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