Ilusión Tal como busco, encuentro ésta sed que por nadie es saciada, De mi mundo eres el centro, de mi alma eres la plaga. Es el poderoso beso que a mi alma asestas. Que en mi edén magnificente, la más bella rosa blanca hallé entre éstas. Yo creí ser omnisciente. La tomé en mis manos, la pinté de rojo Mas por dentro: blanca era aún. . .
Texto agregado el 11-05-2004, y leído por 309 visitantes. (3 votos)