Cigarro y cerveza,
compañeros de soledad,
otra vez aquí enojado y ardido,
mentando madres y deseando males,
esperando comprensión y encontrando decepción,
no hay música, no la que me gusta,
no la que me habla, la que me entiende,
el trabajo me agobia, la pareja me detesta,
la vida se me escapa, el pensamiento… escaso,
salud por la ingratitud y la envidia,
que viva la estupidez y la comedia,
como mi vida y mi suerte,
maldita la certeza,
maldita mi inteligencia,
maldita que me muestras las realidades,
las desgraciadas realidades,
hoy ni llorar es bueno,
el reír sólo aumenta la burla,
mañana vivir y continuar muriendo.
Muriendo;
ese es el propósito de la vida. |