El psicólogo y pensador Hans Maslow estableció una pirámide jerárquica de características psicológicas, afirmando que es un trabajo tributario a la pirámide de necesidades y autorrealización del doctor que lleva el mismo apellido. A continuación resumo la división en estratos realizada:

1. En la base se encuentran los llamados distímicos. Son personas enzarzadas en cuestiones dialécticas, muy susceptibles a la melancolia y la depresión. Su imaginación es muy viva y presentan enormes dificultades para compaginar deseos con circunstancias adversas... Poseen una conciencia moral sólida, que los conduce a la represión de emociones, y dependen en gran medida de juicios ajenos.

2-. En medio están los ciclotímicos. Gente de temperamento variable, oscilan de flirtear con proyectos de suicidio a niveles de euforia sorprendentes. En general aprenden a solventar sus dificultades y son fácilmente influenciables por los instintos y pasiones; son más hábiles socialmente y audaces que los distímicos, por lo cual se adaptan mejor que ellos a la vida.

3. En la cima, aparecen los eutímicos. Son los que moran en el equilibrio positivo entre idealidad y realidad, razón y sentimientos, gozando del estado idóneo de conciencia preconizado por antiguos filósofos (léase Demócrito, Epicuro, Zenón de Citio). Huelga señalar que la eutimía es muy difícil de lograr.

Y bien, Hans Maslow, compungido solitario de intelecto agudo, no sabe en qué escalafón situarse, y eso lo pone a veces contento, a veces triste. Aquejado de gran escepticismo por otro lado, duda mucho acerca de la permanencia de los eutímicos, razón por la que teme que su pirámide culmine en una meseta, sin el vértice de la cumbre, o que incluso se derrumbe.