Siento el aroma en el aire como si las flores regaran su néctar.
Las sombras realzan más el perfume amado.
No estás, sin embargo, todo te muestra.
Como olvidar esas horas que juntos resolvimos el teorema.
Cuando dos son mil al surcar el amor.
Y lo surcamos anhelantes de goce.
Y vivimos abrazados con fé.
Horas que parecían eternas.
Pero tuvieron un fin.
Ya solo queda el recuerdo.
El aroma en el aire tan solo.
El calor de tus labios húmedos.
El regalo de tu entrega de amor.
Texto agregado el 03-12-2008, y leído por 265
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Lectores Opinan
31-12-2008
Muy lindo. margarita-zamudio
22-12-2008
El aroma,lejos lo más importante.
Ese que puede hacer evocar cada gesto,cada caricia,es bello*******
Victoria 6236013
14-12-2008
Entrañablemente sensual, esencia del corazón en cada verso. Un abrazo. almanach