LA NIÑA DE CAMBOYA

Con el aire salvaje de la jungla,
La niña de Camboya,
-Tantos años perdida entre malezas-
A nuestro mundo asoma,
Como animal cazado en una trampa,
Imprevista y traidora…
Su mirada imprecisa, derrotada,
-No se siente persona-…
Grandes ojos que miran recelosos,
Que no saben llorar. ¡y que no lloran!...
Siempre virgen, viviente entre alimañas,
Sin código ni norma…
Tez oscura, curtida por mil vientos,
Gruñidos en su boca,
Sin fe de identidad ni documentos,
Desarraiga y sola,
Sin morada, cual perro vagabundo,
O caballo sin doma….
Intentando escapar de nuevo al bosque,
Desnuda y recelosa,
Su cabello cubriendo la cintura,
En vela, temerosa…..
¿Aprenderá a soñar y a amar un día,
La solitaria niña de Camboya?.
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EMILIO 30 Nov. 2008