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Podría decir que necesito muchas cosas, que necesito por ejemplo un auto nuevo, una casa para el perro o cualquier cosa más, sin embargo, la necesidad se hace más grande cada vez que pienso en ella. Ella que me dio vida cuando estaba muerto. Ella que me amo hasta… olvidar.
Sí, parece que fue olvidando el amor con el paso del tiempo o quizás no… nunca lo sabré.
Hoy quisiera verla y preguntarle tantas cosas, como si me amó como decía, si acaso pensó en mí en lo último que hizo.
Que responda sería difícil… lo sé.
Recuerdo perfectamente cuando la ví por primera vez.
Fue en la iglesia, iba con su madre. Se veía hermosa, parecía un ángel. Tenía su pelo negro, largo, sus labios rojizos y su cuerpo estaba cubierto con un vestido verde… simplemente bella. Sinceramente no entiendo muy bien como ese mismo día terminamos hablando hasta que amaneció. Hablamos mucho, sin embargo, yo solo miraba sus ojos hasta perderme, miraba sus hermosos labios que moría por besar… igual como los necesito ahora.
Después de un tiempo como amigos decidí hablarle de mi amor, ese momento fue simplemente bello, el momento más especial que haya tenido en mi vida. Nos amamos desde el alma, no supimos del tiempo ni de nada más que no fueran nuestros cuerpos.
Los días que siguieron aun tenía el olor y sabor de su piel en mí… igual que hoy.
Pasaron tres semanas sin saber de ella. Desesperado la busque, necesitaba de su calor. Cuando la encontré tenía un rostro de temor y ansiedad.
La abracé.
La besé.
Me habló.
No, no lo podía creer. Por un lado, pensando en mi edad, era terrible, pero por otro, pensando en nuestro amor y su belleza era una bendición.
Ella no dijo nada mas, solo lloro y luego se seco el rostro y se fue. Pero antes me besó. Fue un beso cálido, lejano, agrio, doloroso… de despedida.
Ahora estoy aquí llorando como un niño. Espero que te gusten las flores, las mando tu madre.
Quisiera saber por qué lo hiciste. Un aborto… Dios… con tanto riesgo!!... Cómo?!
Tu deseo de no defraudar a tu padre… acabo contigo amor mío… y con nuestro hijo. Quiero odiarte, pero no puedo. Quiero arrancarte de mi… amor te juro que no puedo. El alma se me murió, mi corazón se detuvo, ya no vivo…
Sabes? A cada persona que veo le hablo de nuestro amor y de nuestro hijo…
Espero cada día cuando despierto verte a mi lado, con la luz del amanecer en tu piel… espero tus labios sobre los míos volver a tener… pero estas tan lejos amor, lejos…

Texto agregado el 30-11-2008, y leído por 80 visitantes. (0 votos)


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