Estuve caminando por tu ombligo.
Mientras lo mordía con mis dedos,
al oído te nombraba los lugares lejanos que recorrí,
Al oído te invite a saborear una taza de café,
ayer, mientras caminaba, las calles se atiborraron de sonidos.
Las calles caminaron a mi lado.
Texto agregado el 30-11-2008, y leído por 85
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