Esta tarde perdido en la inmensidad de la ciudad encontré este lugar, verde y hermoso, me tomo un respiro para disfrutar de de este suave colchón y mirando el cielo una a una empecé a juntar las nubes.

Con ellas empecé a dibujarte y volviste a mis recuerdos, el miedo hizo que no fuera mas allá, estaba enamorándome y tenia temor, esa sensación no la sentí con nadie mas, pasaron muchas mujeres por mi vida, y mirando a través de las nubes me fui dando cuenta que el amor no se dice, se lo siente, como cuando pienso en ti.

Tu mujer! eres y serás la otra parte de mi, mi dualidad, con la cual puedo expresarme tal como soy y abrir el corazón para hablar, no voy a decir te amo, porque las palabras están demás, solo pon tu mano sobre mi pecho y cada uno de mis latidos serán los que expresen cada uno de mis sentimientos.

Por que tu mujer! eres la luz al final del camino, la estrella guía cuando cae la noche, tu mujer!, alma de niña, inocencia perdida gracias por estar ahí...