Metida en su habitación, pensando en lo que habrá pasado a su amado, ese día marta no había comido nada, no tenía hambre, tenía en el estomago cerrado, solo miraba el suelo. Subió a su habitación y alli se encerró para estar en silencio, pasadas horas un ruido le vino, alguien le tiraba chinas al cristal de la ventana, se asoma y era sonia.
- tengo que hablar contigo- le dijo sonia
- ¿qué pasa?- marta puso una cara de asustada
- es de.....
Marta bajó las escaleras de su casa muy emocionada, para saber una noticia de su amado.
- ¡papa, me voy con sonia a la calle!
se acerca marta a sonia con el último aliento de tanto correr.
- dime,...dime-
- no te va a gustar lo que te voy a contar - sonia lo dijo con un tono muy triste - esta muy mal
- ¿cómo que mal?¿qué pasa?¡¡¡cuenta,cuenta,cuenta!!! - marta estaba de los nervios al oir que sonia le estaba dando una noticia mala
- está ingresado, pregunta por tí. Tienes que hacer algo para ir a verlo.
Marta se sentó en el suelo,al coger esa noticia, no se lo cría, pensaban en todo ¿cómo voy?¿qué le digo a mi padre?
Tenía que hacer algo, corrío hacia el padre pediendo ayuda.
- ¡papá, papá!- grito marta - papá déjame a ver... - antes de terminar la frase su padre le soltó una bofetada.
- callaté, tu no vas ha ir a ningun sitio
- está muy mal, necesito verle.
- si el esta mal se lo merece por no dejarte a ti tranquila- le dijo su padre.
Marta no se lo creía lo que su padre le había dicho, era injusto, ni en estos momento es capaz de ayudar a su hija,alguna solución tenia que buscar marta para ir a verlo, no podia estar un minuto mas sin verlo, por lo menos ver que esta bien, saber algo, aunque cosa pequeña sea, lo más daño es que marta este a su lado, para que sepa que con ella puede contar pero ni eso, ahora es cuando tiene que estar mas fuerte marta para luchar por ese amor.
continuara... |