tenía doce años y aún no sabía hablar... sus padres siempre preocupados mas por ellos que por el niño decidieron darle un profesor.
nuestro héroe era un niño astuto que sabía hablar bastante bien pero no quería navegar en el mundo consumista lleno de ideas encharoladas por el pasado. todo comenzó cuando vio aquel ave verde que se puso sobre la ventana de su casa a la edad de un años. nuestro héroe bajó hasta llegar al ave y ya unidos por la inocencia y pureza empezaron a dialogar acerca de la vida que seguirían... el ave le dijo que pronto viajaría muy lejos, junto a varios hermanos y hermanas en busca de algo importante: la sobrevivencia. esto preocupó a nuestro héroe y preguntó el por qué. el ave narró la historia de los hombre en breves palabras y al cabo de semanas y meses de entresueños, nuestro héroe decidió dejar de hablar... "prefiero pensar", se dijo. y eso hizo a lo largo del resto de años hasta llegar a los doce años. los padres siempre ocupados y siempre preocupados vieron en el niño a una especie de extraño. intuían que era especial, y que eso de no hablar era un extraño capricho pues algunas veces le escuchaban hablarle a la noche y a las aves, pero jamás a persona alguna. por mas que hicieron esfuerzos, inútil. y no fue hasta que llegó dicho profesor cuando cumplió los doce años cuando abrió los labios al primer ser humano. no lo podían creer... pero, así fue. se le veía salir al viejo profesor junto al niño, tanto de día como de noche y siempre susurrando algo tan dulce que hasta las aves les rodeaban... pasó el tiempo y luego de mas de dos años de diarias visitas, el profesor se despidió del joven que ya contaba con mas de catorce años... aún recuerdo verle corriendo tras aquel anciano lleno de ropas oscuras y muchas aves a su alrededor. quizá fuera por ello que nuestro héroe pudo llegar hablar con dicho profesor. nuestro héroe empezó hablar pero siempre que lo hacía era corto en palabras. sí, no, puedo, entiendo, de acuerdo, hermoso, terrible... etc. pero, cada atardecer se le veía al joven correr rumbo hacia el bosque en busca de un poco de compañía... un ave que pudiera hablarle. una tarde en que nuestro héroe cumplía los veinte años vio caer desde el cielo un hombre con alas... ¿eres un ave?, preguntó nuestro héroe. el ángel estaba bastante cansado y dijo que no, que tan solo era un ángel... y, diciendo esto se puso a descansar, quedándose profundamente dormido. nuestro héroe vio sus largas y suaves alas, y vio su sueño de volar al alcance de sus manos... no dudó en hacer sus sueños realidad y, con una especie de tijera empezó a cortar y cotar las alas al perezoso ángel... una vez terminado, nuestro héroe se puso las alas y corrió hasta llegar a la cima del campo el cual moraba. vio todo desde ese lugar y también pudo ver al primer ave verde con quien conversara de niño. ¿vuelas?, le dijo el ave. nuestro héroe sonrió y con las alas extendidas pudo responder mientras lanzaba gritos extraños, como los de un ave o un ángel sin alas...
san isidro, noviembre de 2008
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