Como un licor
bebí tus labios
Como un opio
me embriagué
con tus palabras
Como un velero loco
navegué
en el mar de tus ojos
Después
me deshice
poco
a
poco
Me evaporé
en el humo
de tu cuerpo
Tanto, tanto
que de mi propio silencio
no guardo
ni siquiera
el
recuerdo
Texto agregado el 08-05-2004, y leído por 189
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