"Reflexión número dos"


Hace no mucho tuve una tarde inspiradora, lo recuerdo bien, hacía frío y tú lucias tan bella, era casi perfecto, todo parecía posible aquella tarde, las coincidencias, el buscar igualdades, el anhelar unos labios ajenos, todo era frío, eras tú, era yo, con unas cuantas pinceladas de nosotros.

Hace no mucho parecía, que podría, sería feliz, lo recuerdo bien, mi suéter en tu cuerpo, tus mayas incitando mi mente, y mis manos congeladas, apretadas, llenas de ganas de ti, de tu cara, tus ojos, tu pelo, hace no mucho, todo parecía posible.

Un árbol moviéndose, nosotros bailando al compás de una tonada no escuchada, unos labios deseosos y las ganas tan ahogadas; dónde han ido aquellos sentimientos, en dónde se perdieron, dónde los has guardado, ¿dónde puedo recuperarlos?

Una tarde que murió, noche renacida, amor en cuarto creciente, eclipse de algo que no fue, indiferencia tan congelante, distancia tan sofocante, ¿dónde te perdí?, ¿dónde me olvidé? dime, ¿dónde nos morimos? ...