Una persona del sexo femenino, recientemente recibida de podóloga, en poco tiempo de esmerado desempeño haciendo uso de su profesión, descubrió una ignota habilidad que nunca imaginó como posible tener, y es la de leer el futuro en la planta de los pies. Lo que hizo que la demanda comercial se desplaze hacia el lado de contratar los servicios de esa nueva especialidad.
La vida va dejando un estela que exibe el contenido de la marcha, por lo tanto el futuro será idéntico a la huella que se esfuma.
Pero un día descubrío grandes misterios en los pieses de uno de sus cliente; enfermo terminal con gran callo plantal a extraer, plantas que igual brillan como piedras preciosas haciendo estremecer al corazón por la energía que desprenden,
que emanan. Por todo el conocimiento que allí se revela, casi como las bondades de una Biblia.
De esa intensa relación nació un eterno amor,
que duró lo que vive una flor en la planta,
puesto que el hombre a los pocos mese murió.
Ella alcanzó a poder pernoctar varias inolvidables veladas, desvelada, acostada del revés,
decía, noches enteras observando maravillada esa divina luz que tenían, y en ese lapso descubrir muchos secretos del cielo, que en relativamente poco tiempo la transformaron en mujer multimillonaria. Cosa que nunca buscó pero que nunca estará de sobra residual.
"Un cuento es un cúmulo de palabras extraordinariamentes combinadas".
fin.