Derivaciones desde la distracción 1

•El hombre esta condenado a una felicidad parcial mientras siga buscando ser completamente feliz.
•El chisme tiene 2 funciones cognoscentes: saber lo que se tiene que decir sobre un suceso que a nadie le consta y descubrir partes de la personalidad de quien viene corriendo a contarlo.
•Sólo mirando a los ojos que sonríen se siente la atracción del vacio y la inevitable tentación de arrojarse.
•Él tenía la horrible manía de contar una y otra vez los lunares de la cara de su novia; le pregunté por qué y me respondió: “para recordarlos y sentir que la conozco”. ¡Que horrible es tener que apegarte a defectos en la piel para no angustiarse por lo desconocido!
•El tiempo nunca camina tan lento como cuando se mira fijamente un reloj de manecillas.
•Lo que me agrada de los positivistas es que no tienden a ser negativos.
•Tengo la manía de meterme en platicas en las que no se de que hablan, pero como sueno tan seguro la gente suele creerme. Al final siempre les digo que no es cierto, que no tengo idea de lo que dicen, pero a la siguiente vez que lo hago me vuelven a creer ¡Que no me hablen de la perdida de la inocencia!
•En el fondo, lo atractivo de los tacones es el sonido que producen. Podría enamorarme de una mujer que no he visto con sólo oírla caminar en tacones. (Eros sonoro).
•Usualmente la realidad suele parecerme de lo más irreal; los sueños hacen más coherencia, por lo menos los perros parlantes son buenos filósofos.