TU COMUNIDAD DE CUENTOS EN INTERNET
Noticias Foro Mesa Azul

Inicio / Cuenteros Locales / mialonso / HERENCIA GENETICA

[C:377913]

Rodrigo siempre intuyó que los hombres de su familia estaban malditos.
A su abuelo Agustín no lo conoció, murió joven a manos de su mujer Amalia. Dicen que el día que mató a su marido los ojos se le llenaron de espanto y el corazón de remordimientos y que la locura acudió en su ayuda para evitarle tener que explicar porqué le apuñaló, en defensa propia, aquella mañana mientras cocinaba.
Con su padre apenas tuvo trato, porque cuando todavía era un niño, él ya estaba entre rejas y su madre le mantuvo alejado de la cárcel, ocultándole el crimen por el que estaba pagando. Sabía que padecían el mismo mal pues el rictus de dolor en su cara, suavizado por las drogas carcelarias, era idéntico al suyo.
Rodrigo peregrinó, durante años, por los mejores médicos en todas las especialidades, intentando averiguar la causa de su padecimiento sin llegar a un diagnóstico concluyente. No encontraban nada físico que justificara sus episodios y rendidos, sin saber por donde seguir, le derivaron al Dr.Castañeda.
Acudió a las primeras sesiones, esperanzado, pero llevaba un año de terapia, sin ninguna mejoría; a veces pensaba que no merecía la pena seguir viviendo y, en más de una ocasión, le tentó el suicidio, pero la falta de valor y la idea de dejar éste mundo sin averiguar la causa de su sufrimiento, del sufrimiento de su padre y, hasta donde él sabía, del de su abuelo, le frenaban.
Cada vez eran más insoportables aquellas punzadas en la boca del estómago que le estaban matando y que nacieron con él pues no recordaba cuándo eligieron su cuerpo para torturarle.
Llegaban con el sigilo de un animal al acecho, lentamente, deslizándose garganta abajo, hasta alcanzar el vacío del estómago. Era cómo si cientos de garras se clavaran en sus paredes, retorciéndole las entrañas y provocándole espasmos insoportables.
Se empapaba de un sudor frío y los ojos se le volvían hacía adentro intentando averiguar qué sucedía tras las cuencas.
Algunas crisis le llevaban hasta el desmayo del que salía con la garganta seca, la boca cuarteada, el estómago hinchado y una sed desértica.
A otras les ganaba la partida. Al primer síntoma corría a comer y engullía sin medida todo lo que encontraba, con hambre de siglos, comía hasta que las garras satisfechas soltaban su presa y paraban los retortijones.
Esa tarde, sentado frente al psiquiatra, mientras éste ojeaba su historial, le atrajo, como un imán, el corte que el médico tenía en el labio superior. Intentaba evitarlo pero, como una polilla sin voluntad frente a la luz, miraba obsesivamente la herida. Se imaginó la mano huesuda del médico deslizando la cuchilla de afeitar por la cara, llena de surcos añejos y vio como el hilillo de sangre reseca se volvía caudaloso, liberándose a borbotones hasta alcanzar la bata blanca, salpicando la mesa…
Las garras empezaron a trabajar con más fuerza que nunca, intentando salir por su boca… Analizó la habitación buscando con qué calmarlas… no vio nada
Como un animal hambriento saltó sobre el médico, mientras éste apretaba el botón de emergencia bajo su mesa.
Unos meses después, en el aula de la facultad de psiquiatría, el doctor Castañeda, ajustándose la prótesis facial, daba una clase magistral sobre canibalismo.

Texto agregado el 01-11-2008, y leído por 1719 visitantes. (4 votos)


Lectores Opinan
29-11-2008 Buena historia. Es una lástima que solamente pasemos por los textos más cortos y que relatos como este pasen inadvertidos. Te felicito. poirot
15-11-2008 tremenda historia, te atrapa hasta el final divinaluna
12-11-2008 Crudamente atrapante! Me gustó leerte. 5* ZEPOL
03-11-2008 La última frase está muy bien ahora Ninive
02-11-2008 Muy bueno, en todo momento mantienes una tensión que desemboca en un buen final. La última frase tambalea un poco. Te felicito ninive
01-11-2008 Interesante. RhCastro
 
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login


[ Privacidad | Términos y Condiciones | Reglamento | Contacto | Equipo | Preguntas Frecuentes | Haz tu aporte! ]