Estoy acostada en el borde del estanque de
la vieja casona de la abuela, con una pierna
y un brazo remojados en el agua.....
la tarde es hermosa, estoy rodeada de árboles de mango, guanabana, zapote y limón indio, que debido a la lluvia de ayer, parece que estrenan follaje, el intenso verde combina con el rosa y lila del cielo creando una escenografía peliculesca,
(la banda sonora corre a cuenta de pájaros que se amodorran en las ramas) No pienso, no recuerdo, no necesito, y no deseo nada.....
es como si mi yo, mandara de vacaciones al intelecto y las sensaciones se apoderaran de mi cuerpo, no sé si el agua mece mi mano, o mi mano acaricia el agua, los rayos del agonizante sol,
me llegan a intervalos, al capricho del viento que acerca y aleja las ramas de los árboles, me llegan los olores a hogaza de la panadería de la esquina y los sonidos de la radio de algun vecino....
No sé si soy parte del entorno,
o el entorno forma parte de mi, pero
¡nada me importa menos!
Permanezco lacia viviendo la vida,
o quizás dejando a la vida vivir por mí.... |