Esperas solo
En la intensa oscuridad que te come
Con la mirada hacia un abismo
Ciega que te carcome

Desnudo inultimente
Ya de nadie obtendrás placeres
Y si te acoge la gloria
Será solo superficial
Nunca volverás a amar

Detrás de ti
Miles de agujeros se esconden
Dispuestos a apoderarte
Cuando el dolor no soportes

Por no elegir de mis manos el calor
Por rechazar mi tierna pasión
Perdes contra el mundo, contra el hedor

Era yo el muro que detenía tu derrota
Eran en tus caídas la más leve gota
En tus caminares cansados
Minaba de amor tus pies lastimados

Te llevaste de mí
Quitaste de mi lado
El frasco donde guardaba la compasión
Dejando cambio un oloroso rencor

Me doles todavía en el pecho
Te vengas todavía tu espectro en mi mente
Con sutilezas en ajenos lechos
Me devuelve aun tus besos candentes

Y si alguna minerva complace tu camino
Te acompañara y solo será
La acalorada soledad

No tenias que predecir nuestro destino
No tenia que escupir lengua de serpiente
Las últimas palabras que quitaron tu velo
Borraron lo poco que le quedaba a tu sirviente