Tardes matutinas
llenas de esperanza
tardes que no acaban
van llenas de segundos

Espero lo que no llega
no sé si llegaste
no sé quién eres
mas sé que me escribes

Gargantas silenciadas
susurros degradándose
desde el albor hacia la oscuridad

Dime quién eres
avísame cuando vengas
que el fluir de la hiel quiere descansar
el mastique del dolor
está hastiado de mi garganta

El dolor maniqueo
que has provocado
lujuria luciferina
recrean mis recuerdos
recuerdos recreados

Dantesco placer
maldoror estaría aterrado
de beber el elixir de tus ciernes
mas no los he bebido
y se estrecha mi coraza

Dante lujuriado
se avergonzaría,
ni la tierra de neruda
de las guerras que lo hirieron
abrazarían la piel de sus entrañas

Inmensa soledad
añoran mis futuros venideros

minúscula compañía necesito,
aplacar el dolor
del albatroz enjaulado.