DIOS®

Descripción y propiedades: Dios® actúa en el sistema nervioso central, produciendo en la corteza cerebral, y muy especialmente en los lóbulos frontales y temporales, un bloqueo reversible aunque potente de las neuronas eferentes del sentido común. A nivel subcortical, se adhiere preferentemente a receptores vinculados a respuestas emocionales.

Acción Terapéutica: Tranquilizante potente. Efecto ansiolítico parcial. Estupefaciente. Sedante suave. Frenosupresor. Efecto placebo de eficacia variable. Se ha sugerido efecto dopaminérgico y serotoninérgico, aún no demostrado.

Indicaciones: Intolerancia a la realidad. Duelo agudo y crónico. Oligofrenia. Contumacia refractaria a la razón. Crisis de pánico. Posmodernismo agudo. Uso extremado en caso de dudar acerca de la autonomía moral. Coadyuvante para tratamiento y rehabilitación de pacientes con alcoholismo y/o drogadicción.

Posología: Dios® se puede administrar ad libitum desde edad pediátrica en adelante en dosis diarias. En niños, puede ser administrado por personas distintas de los padres, si bien está demostrado que sus efectos son mayores cuando estos participan de su suministración.

Efectos Colaterales: Adicción. Dependencia. Se ha descrito efecto opiáceo-mimético (descrito por Marx et al). Síndrome de privación en momentos de crisis. Anacusia (sordera) funcional.

Contraindicaciones: No debe usarse en pacientes con antecedentes de hipersensibilidad al absurdo. No usar en conjunto con altas dosis de intolerancia.

Precauciones: Debe administrarse con precaución en personas usuarias de Dogma®, por la acción sinérgica de este último. La suspensión brusca de Dios® puede producir trastornos depresivos severos, por lo que se aconseja la disminución paulatina, al igual que otras drogas de acción a nivel sináptico cortical.

Presentaciones: Varían en cada país. Se prefiere presentación única de un comprimido recubierto. Rigurosos estudios recientes han llevado a que las presentaciones de tres o incluso más comprimidos, sobretodo en países asiáticos, sean paulatinamente reemplazadas por esquemas terapéuticos abreviados de un comprimido diario, dada la demostrada mayor propensión de éstos a generar los efectos dogmáticos y frenosupresores buscados.