¿Que me quieres amor?

“Sueño con la primera cereza del verano. Se la doy y ella se la lleva a la boca, me mira con ojos cálidos, de pecado, mientras hace suya la carne. De repente me besa y me la devuelve con la boca. Y yo que voy tocado para siempre, el hueso de la cereza todo el día rodando en el teclado de los dientes como una nota musical silvestre.(…)”
Manuel Rivas


Sueño con el primer verano, el olor de la hierba cortada expandido por el tremendo calor de la tarde. Estoy sudado, y un poco cansado, tumbado sobre la hierba viendo que el sol se retira, no hay luna. Tumbada a mi lado hablas, creo que estás feliz, pero también nerviosa. Yo callo, los nervios siempre me dieron timidez.

¿Qué me quieres amor?

Recuerdo el primer otoño, los colores calidos, rojizos, ocres… del bosque de hayas. Las hojas en el suelo, depositadas sobre el musgo por la implacable rueda del tiempo. Caminamos, al lado mío caminas, con la cámara de fotos en la mano, divertida, traviesa… Yo callo, el otoño siempre me puso melancólico.

¿Qué me quieres amor?

Rememoro el primer invierno. Añoro la nieve que no cae todos los años. ¡Me gusta tanto la nieve!. Lluvia y frío, tarde gris y plomiza. En la cola del cine callas silenciosa agarrando mi mano dentro del bolsillo de mi abrigo. Yo hablo, sin parar, el silencio entre nosotros me pone nervioso. Sé que no me escuchas, pero no me importa, tu mano, en mi bolsillo, no suelta la mia.

¿Qué me quieres amor?

Sueño la primera primavera. Hace frío, aunque dentro del coche se está bien. Conduces con la música puesta, y hablas. Me miras enfadada cuando enciendo el cigarro, abres la ventana. Al de dos minutos, me vuelves a mirar, sonríes, me lanzas un beso. Con las gafas de sol puestas destacan más tus labios rojos, tu boca, ¡como amo esa boca!. Paras el coche en el arcén, apagas el motor. Mira, ya ha llegado la primavera, me dices. ¡Te quiero!, te digo; por que la primavera siempre me puso sincero.