Mujer Sensual


Que no se vaya esa mujer sensual de mi presencia
Y permanezca sola en su silencio
Recogiendo su cabello suelto.
Conozco demasiado sus gestos,
-los cinco gestos de su cara,
Cuando cierra sus ojos en la playa
Y dibuja aquí sobre la arena
Su silueta.

Que no se vaya por mí a otro
Lugar
Ni con mi buceó hile la media vuelta
De su despedida.
¡Hay ya tanto misterio aquí en la playa,
Tantos arpegios en busca de alguna guitarra!
En fin, que no se vaya de mi presencia
Con su corazón de gitana
Para escuchar sus latidos,
Ya basta.

Y tú, sensual mujer que, de pronto,
Llegas en pos del piropo onomatopéyico,
Recoge aquí cuanto de estos cumplidos puedan
Darte,
Pero elude las voces de entrelineas
Las miradas de los curiosos
Y sus gestos maliciosos…
Oh, querida amiga, acuérdate de tus sueños,
Hay sueños que vivir por la noche.


Alberto Garcia