la nave de la vida con sus incongruencias ,

pasa,
los labriegos en el día anterior , pasan con sus ganados,
la periferia rota y olvidada estan estática desde su muros quebrados,

los hombres carguen en sus valijas la memoria de un pesado destino,
porque es simplemente pasado,

el tren ya se apodero de la espera,
esperamos
pacientemente
el sonido metálico del convoy el juego de nostalgias de un ayer,

vivimos en la trágica conversiones de lo números,
una estación
¿una historia?
unos bancos muertos y fríos,
un cadáver "somnoliento"

que quedando expuestos en las orillas del transito mudo del tiempo,
trasparentes son
las intenciones
un pasador de imágenes,
el( vende idas y regresos un
un viaje,

un cuentero simula ser luminoso
entre la luz mortecina de la tarde,

de repente se le apaga la farola,
al maniobrista,
se fuma un cigarrillo y piensa en el valle lejano de su tierra natal,

un perro queda a oscura,

como un papel mojado,

como un paquete que no ha sido visto por la gente
sucio y en la puerta orinando ""el pulcro adoquín"",
no hay salas de esperas todo es ilusión

¿que sera hecho para adorna la calzada que los habitantes del planeta organizados temen ensuciar?..

son las doce de la noche en este pueblo Cañaveral, de las Limas
pasan tres niñas justo a la hora que estoy leyendo a Diogenes,

me tiran suavemente una piedra que estalla como estalactitas en mi puerta,

no digo nada,

no expreso sentimiento de soledad,

las rarezas son bruscas no se conocen en el debido momento de su clara imagen,

porque somos ciegos,

a los segundo propios de un ciego
a los segundos,
no hay mas ruido alguien se apropia del silencio,
¿Dios?
sierro el viejo libro,

cierro en los ojos con Diogenes murmuro un silbido imperecedero mas despierto a otras latitudes encerrado en la sombra de las cosas,


todas las opiniones
no son falzas
tampoco
sucias
y paso una hora,

concientemente,
reprobando las trampas de los días
de positivas ideas el magno mundo esta conforme,

es un paquete de ilusiones

no me preguntare porque las niñas con suavidad tímida me tiran piedras a la ventana a la puerta de entrada de los sueños,,
la ventana , es poesía las piedras en manos tímida son poesía , la noche en la hora exacta de las doce ,
es bien poesía...


Juan_Poeta