ASÍ FUE...


Nunca conocí en el pasado una voz tan hermosa como la de Alejandra.
Cantaba en invierno, cantaba un lunes, cantaba en el día. Cantaba cuando estaba triste, algunos dicen que se le escucho cantar dormida. Eso era algo mas de lo que una persona con dos dedos de frente podía decir. Alejandra tenia 16 años y siempre la escuche cantar en los concursos de la escuela secundaria.
Yo nunca canté, siempre tuve una voz que nadie quiso escuchar. Envidiaba a Alejandra. Todas las cosas y sentimientos que ella quería decir siempre los decía cantado. Una vez ella tuvo un novio. Y efectivamente lo conquistó con su voz.
Esa no fue la única vez que Alejandra dijo lo que sentía cantando, pues cuando fue cumpleaños de su mama y Alejandra la despertó con las mañanitas. Yo la envidiaba. No estoy seguro del motivo de mi envidia. Tal vez era su hermosa voz o quizás el hecho de que por medio de ella, Alejandra podía decir todos los sentimientos posibles
Pero lo mío nunca fue el canto. Mi voz es tan chillona como la de una garza y tan desentonada como la de mi tía Angélica cuando tiene gripa.
Mi hermano siempre me decía que yo tenia que buscar otra manera de poder decir lo que siento. Y yo tome su consejo.
Alguna vez dedique varias noches a memorizar una poesía. Yo pensaba que la había memorizado muy bien, pues hoy hasta me acuerdo del titulo: "Reír llorando". Pero me parece que mi memoria no fue tan buena el día que la quise recitar. Empecé por el final y termine con el principio. Recuerdo que también tardé mas de tres minutos en empezar porque las palabras no querían salir.
Me aplaudieron, aunque hoy no sé si fue por que realmente les haya gustado o porque sintieron pena por mí. Pero, ¿saben que?, realmente eso no me importa porque a mi nunca me gustó declamar.
Pues si...así fue, pase mi vergüenza y ni siquiera conseguí lo que quería. No pude emocionarme ni tampoco me sentí contento.
Pero yo no soy una persona que se deje vencer fácilmente. Ese fue mi primer intento. Es cierto que me dejo un mal sabor de boca, pero eso no me detendría.

Alejandra seguía cantando. Cantaba en primavera, cantaba en julio, cantaba en la iglesia. Alguien dice que la escucho cantar comiendo. Eso yo no lo creí.
Sin embargo, ahora yo ya no envidiaba a Alejandra. Creo que hasta me aburría. Pero eso no cambiaba nada porque yo aún buscaba una manera de que mi alma hablara por si misma.
Mi hermano volvió a hablar conmigo y esta vez él mismo me dijo que tratara de dibujar. Yo me reí en su cara. Pero ¿qué creen? A los dos meses me inscribí en un concurso de dibujo.
En una semana pinte tres cuadros. El primero lo rompí al terminarlo, el segundo también y el tercero era bastante malo, pero lo presente el día del concurso. Me gané un papel que me agradecía mi participación.
Yo era un gran problema. No tenia ninguna manera de poder decir mis ideas. Mis sentimientos seguían dentro de mí.
Entonces me olvide de todo. Pasaron muchos años y me case. No pude cantar en mi boda como Alejandra lo hizo en la suya. Pero no importaba. Tal vez no todos podemos sacar nuestros sentimientos. Tal vez no todos tenemos algo que decir. Tal vez para algunos nuestra misión en el mundo es quedarnos sentados, sin hablar, ni cantar, ni nada que se le pueda parecer. Tal vez yo soy una de esas personas. Tal vez soy el único. Pero no importaba.
Hace unos días cené chocolate. Mi mente estaba tan despierta que di vueltas en la cama por mas de dos horas. Después me levante y mire por la ventana. Una enorme ventana porque mi esposa necesita la luz del sol en las mañanas. Mire hacia el cielo y vi como las estrellas no tenían manera de expresar sus pensamientos, solo podían brillar. Entonces me di cuenta de que todos tenemos algo que decir y algunos tenemos cosas buenas que hacer. En México habemos muchos y si alguna vez el país esta en peligro ,no importara quien cante o quien dibuje. En un segundo todos se convertirían en soldados y sacarían sus emociones.

Fue entonces cuando me senté frente al escritorio que nunca antes fue usado y comencé a escribir. No sé si mi escrito sea bueno o malo. Tenia demasiado sueño y no lo pude analizar. Sin embargo, esta escrito al pie de esta hoja, justo después de mi nombre.
Espero que les guste.

Atentamente:
Francisco Gonzáles Bocanegra



"Mexicanos al grito de guerra....