Entre píxels y demás... aquí me tienes. Agazapado en un rincón para dar mi gran salto. Ni nervios, ni nudos en el estómago, nada me detendrá. Ya estoy preparado e introduzco la cabeza en la pantalla. Al principio sólo crípticos puntitos azules y negros. Me asomo un poco más al abismo digital y se cuelan por mi nariz una ristra de ceros y unos. ¡Qué cosquilleo! Estornudo.
Finalmente encajo todo mi cuerpo en el cristal de plasma. Estoy de pie en el filo de mi pantalla. Atrás queda mi hogar, adelante el disco duro, abajo el microprocesador y arriba, oculta tras una impersonal IP está ella. Apenas un apodo dejando entrever sus gustos. Salto con todas mis fuerzas y me quedo suspendido en el espacio… levitando. Escucho expectante la voz de dos teleoperadoras discutiendo:

Servidora:-Identifíquese.

Modem local: -IP “……….. “solicitando envío de información.

Servidora: -Estableciendo envío.

Servidora: -Estableciendo envío.

Servidora: -¿Pero qué coño es esto? ¿Qué mierda quieres enviar? Es más pesado que un libro de Camilo José Cela.

Modem local: -Al usuario.

Servidora: -¿Cómo que al usuario?

Modem local: -Sí, el mismo se está enviando.

Servidora: -¡Ostia! Y yo que pensaba que lo había visto todo en cuanto a usuarios torpes: utilizar el reproductor de CD extraíble como posavasos, quemarse las pelotas por no quitarse el portátil de encima cuando está muy caliente, borrar una falta de ortografía de un editor de texto manchando la pantalla con corrector de papel…

Modem local: -Es que el pobre está enamorado y quería darle una sorpresa a su Julieta, irrumpiendo en su pantalla con un ramo de rosas.

Servidora: Es que el pobre, es que el pobre… ¡es que el pobre es jilipollas! Que envíe un correo electrónico como todo el mundo, o le deje un mensaje en su libro de visitas. ¡Es tan difícil de comprender que por aquí no cabe!

Modem local: -Es que quería ser original.

Servidora: -Con la de trabajo que tengo no estoy para aguantar originalidades. Hay que seguir un protocolo. No se puede enviar cualquier cosa. Le dices a tu usuario que deje de hacer experimentos. Si se aburre y quiere sorprender agradablemente a su cariñito que se ponga a régimen. He visto mucho “mega kilo terabyte” adiposo en el mensaje.

Modem local: -Bueno, pues vale.

Servidora: -Conexión abortada.

Dejo de levitar. Al caer mis sueños (y mi cara) se estrellan de bruces con la gélida racionalidad (y el frío suelo). Entonces la verdad se me presenta más cruel e inevitable que nunca… soy más ancho que mi ancho de banda.