El no comprenderá
el polvo que se espesa en la agonía
la batalla de Narcizo
enamorado del agua
que nunca se aquieta.
El no comprenderá
el ojo entre las nubes
regalo de lo infinito
y la urgencia del reproche
tentando a las lágrimas
al precipicio de la noche.
¿Qué será entonces de mi poema?
¿Del árbol olvidado entre las hojas?
¿De la lengua atrapada en la memoria?
¿Que será?
¿Del libro secreto?
¿Del que se vuelve niño cuando cae la tarde
y su nombre se pierde en el llamado mortal del rayo?
Texto agregado el 30-04-2004, y leído por 209
visitantes. (3 votos)
Lectores Opinan
24-08-2005
Un poema distinto a tu habitual modo de describir sentimientos, excelente. mandragoras
06-05-2004
No descuides este hija, arreglalo un poco, que no te de pena borrarlo y colocarlo de nuevo, habra muchos, asi como yo, que te vamos a leere. Au revoir. salvatiere
01-05-2004
... y su nombre se pierde en la caída mortal del rayo?, me hubiera gustado más. Tu poema tiene imágenes muy bellas. maravillas
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