Me siento como una tonta al dar por hecho algo que era solo una ilusión. Nada de lo que hago es perfecto, siempre hay algo que no sale bien... me siento muerta muy dentro con el corazón enmarañado, donde las arañas son las únicas que sienten y pueden amar, tejen sus telarañas en las paredes marchitas y viejas de mi corazón.

Aun no sé quien eres, pero te conozco, sé que algún día dejare de nadar en el lodo ensuciando mi alma con pensamientos de amor frustrado, llenándolos de odio hacia mi esencia, parezco un zombie en la maleza buscando los pedazos de un amor que nunca existió. Enterrando un recuerdo de color ternura y sabor a amor, algo artificial.

Cuando dejaré de confundir lo bello por lo criminal, a la oscuridad por luz, porque sigo pensando que las lagrimas son indicios de felicidad, si estas son provocadas por golpes al corazón?. Hasta cuando dejaré de emocionarme por una estúpida señal de regocijo en mi ser?.

Dejaré de pensar en el amor como algo bello y tierno, ya que confundo a la luna con el sol y al sol con las estrellas. Siento que la felicidad se ha alejado de mi hace tiempo, me ha abandonado. Es más, no la conozco ni siquiera la he sentido. Soy como un ave sin alas, como una flor sin pétalos, me siento, me siento .... como yo, así, un amor sin color ni matices, un amor mudo y sordo que no siente. Ahora soy inmune a la belleza del querer y necesitar a alguien. No necesito palabras, ni besos, ni caricias ajenas a la soledad.

Sobreviviré en mi mundo, a mis noches sin luna, a mis caricias con la muerte, a mis versos sobre la cruel realidad de mi vida, a la cruda bienvenida de un nuevo día, a sentirme vacía cada que despierto y dormir simplemente igual. Pero me siento bien, como nunca, sé que puedo demostrar al mundo que el amor no es necesario para vivir, sería la primer mujer que viva sola, desterrada de todo y todos. Mis versos me acompañarán hasta mi muerte, serán el diario obscuro de mi hueca vida y momentos como el que acaba de pasar nunca jamas se presentarán, nunca besaré otros labios que no sean los de mi alma, ni aceptaré una dulce palabra de tu boca, ni tus alentadoras frases, ni siquiera recordaré tu nombre... Moriré sola, en mi cama llena de escamas que liberaré cada día junto al estúpido recuerdo del día en que me enamoré de una ilusión.

TLiLan