Me ejercité en mirar tu rostro de espejismo
de arbol ofreciendo moléculas en flor
obstinado en el desierto, afectivo
Alumbras los huesos en el soplo
del tiempo que devora
No sino en tu territorio deseo vivir
transfigurando las murallas del silencio
Porción del paraíso perenne
Amorosa calumnia que sepulta turbación
Música que fascina en el oasis del éxtasis
Tus umbrales me conducen a los tambores
del agua en la cascada del pensamiento
Sólo una voz mágica me rescata de las sombras
de la muerte que galopa hacia mí
Donde comienza a girar el mundo
donde finaliza el vértigo de no estar más
De no ser siquiera una mota en el horizonte
Me rescatas de la inexorable nada que me habita
obligando a creer que no seré alimento de la muerte
Paisaje que acompaña la inútil sed de eternidad
http://laclepsidrademarcela1.blogspot.com/
Texto agregado el 30-08-2008, y leído por 215
visitantes. (10 votos)
Lectores Opinan
31-08-2008
Las imágenes son a mi juicio más que buenas.... auiles
30-08-2008
Me gustó mucho tu poema... sincero, complejo, profundo gotademar
30-08-2008
El amor nos salva hasta de nosotros mismos . Bello poema . autumn_cedar
30-08-2008
Hermosa poesía, sensaciones, metáforas...calidad y calidez.+++++ crazymouse
30-08-2008
Voté 5*...bellas imágenes recorren tus versos... naiviv